Si viajas con Aerobús desde el aeropuerto hasta al centro de la ciudad, si te bajas a la última parada, que se llama Plaza Cataluña, a tan solo 15 minutos caminando encontrarás el Museo del Chocolate.
Ubicado en el barrio del Born, en un edificio histórico que en el siglo XVIII también tuvo relación con el chocolate, es perfecto para visitar con niños, pero también para golosos de cualquier edad.
El chocolate estaba presente en los menús de las academias militares de ese siglo. Desde la época de los descubrimientos, a partir del siglo XV, el chocolate ha tenido un papel dentro del tejido económico y social de la Ciudad Condal. De esta manera, el puerto de Barcelona actuó como punto de partida del producto para su comercialización y difusión por Europa.
Sin embargo, es en la ciudad, a finales del siglo XIX, donde se reconoce el primer obrador que transformó el chocolate como bebida en un producto sólido.
Además de visitas guiadas, el museo también ofrece talleres dirigidos a público de diferentes edades y también a profesionales del sector:
- Maridajes con cerveza, cava o licores
- Degustaciones de todo tipo de chocolates
- Cursos de pastelería para niños y adultos
- Arte con chocolate
El Museo del Chocolate de Barcelona pretende contribuir con sus actividades a la divulgación de la cultura del chocolate para incrementar su valor cultural y gastronómico y, al mismo tiempo, difundir la tradición chocolatera y pastelera de Cataluña.
Para tener toda la información sobre horarios y precios puedes consultarlo directamente haciendo clic aquí.