Un fin de semana en Londres

¿Tienes pensado viajar pronto a Londres? La capital británica es una ciudad repleta de lugares que visitar y experiencias por vivir. El Big Ben, Piccadilly Circus, el London Eye o el Palacio de Westminster son tan sólo algunas de las mejores atracciones de una ciudad que enamora a todo aquel que la visita. 

Sin embargo, en ocasiones los viajes son fugaces y un fin de semana quizá parezca poco tiempo para descubrir todos los secretos de un lugar como Londres. Sin embargo, con buena planificación y una guía como la que hoy os hemos preparado en Aerobús podréis ver lo fundamental. Eso sí, os lo aseguramos…¡querréis volver con más tiempo! 

Día 1 

El lugar elegido para comenzar nuestra ruta particular por Londres es la estación de metro de , desde donde encaminaremos nuestros pasos hasta la famosa Torre de Londres. Si queréis entrar, os recomendamos –como en la mayoría de atracciones turísticas de la ciudad- comprar las entradas con antelación para evitar sorpresas inesperadas. 

Desde allí seguiremos nuestro camino hasta el Tower Bridge, uno de los puentes más famosos del mundo y sin duda un icono de la city londinense desde 1894. Desde él se puede disfrutar de una bonita vista tanto de la ciudad como del río Támesis, así como ver el HMS Belfast, un buque de Guerra convertido en museo sobre el propio río. 

Próximo al puente tendremos el City Hall, construcción diseñada por el afamado arquitecto Norman Foster que aloja el ayuntamiento de la ciudad. Cerca se encuentra el segundo rascacielos más alto de Europa, bautizado con el nombre de The Shard, que cuenta con 339 metros de altura desde los que podremos tener una excelente panorámica…previo pago, claro. 

Siguiendo por el borde del Támesis podremos visitar también el Millenium Bridge, puente que tras cruzarlo nos dejará ante la impresionante catedral de St. Paul. El Museo Nacional de Arte Moderno, conocido a nivel mundial como Tate Modern, es una parada obligatoria gracias a su entrada gratuita. Si queréis hacer una parada para comer, la zona de Borough Market es una opción ideal. 

 Por la tarde, nuestros pasos nos llevarán hacia el Shakespeare’s Globe Theatre -que se puede visitar por la módica cantidad de 5 libras- y el Royal National Theatre, los dos teatros más famosos de Londres. Si os quedan fuerzas y no queréis dejarlo para el día siguiente, los Jubilee Gardens y el London Eye son visita obligada, pero aún más el Palacio de Westminster y el Big Ben…donde terminaremos un día que seguro os dejará agotados. 

Día 2 

El segundo día de nuestro fugaz viaje a Londres lo empezaremos en otro de los Museos más famosos del mundo: el British Museum. Para llegar hasta él, lo ideal es bajarse en la parada de metro de Holborn o en Tottenham Court Road, desde donde ya lo veremos debidamente indicado. 

¿Y qué sería de Londres sin las compras? Las calles más recomendadas de la ciudad para ello son sin duda Oxford Street y Regent Street, en cuyo inicio se encuentra la famosa plaza de Piccadilly Circus, el sitio donde probablemente se celebren más encuentros de ciudadanos londinenses a lo largo de todo el año. Y si el primer día te quedaste con ganas de museos, el Queen’s Theatre, el Gielgud Theatre y el Palace Theatre son otros de los más destacados. 

Cerca de éste último, cerca de Charing Cross y girando hacia Newport Ct, podréis disfrutar del ambiente de la comunidad china en el barrio de Chinatown en el Soho. Tanto aquí como en Leicester Square encontraréis varios lugares en los que hacer un merecido alto en el camino y comer algo. 

Una vez calmado el estómago, nos dirigiremos a Trafalgar Square, construida en conmemoración de la victoria del almirante Nelson al mando de las tropas inglesas en Trafalgar. Aquí encontramos otro de los puntos culturales clave de la visita: la National Gallery de Londres, que alberga piezas fundamentales de la historia del arte como los girasoles de Van Gogh o la Venus del Espejo de Velázquez. 

El arco del almirantazgo será nuestra siguiente parada, tras lo cual alcanzaremos la residencia de la familia real británica: el Palacio de Buckingham. Hacer un pequeño descanso en St. James Park siempre es una buena idea antes de finalizar el día con la visita al número 10 de Downing Street –la casa del Primer Ministro británico- y, por supuesto, un segundo vistazo nocturno a Piccadilly Circus. 

Como podéis ver, es perfectamente plausible visitar Londres en tan sólo un fin de semana. Eso sí, ¡no hay tiempo que perder! Así que si viajas desde Barcelona, elige Aerobús para llegar hasta el aeropuerto y no dejarte ni un segundo en el camino. Compra tus tickets con antelación y disfruta de la capital británica.